Hace algunos días en El Salvador se celebró el día del publicista y el diario de hoy publico una revista especial, entre las paginas encontré este reportaje que me pareció muy bueno y quería compartirlo con ustedes, espero que les guste tanto como me gusto a mi
“El ser muy bueno no es suficiente, tienes que ser muy, muy, muy, muy, muy bueno”
“Practica el descontento divino. Es el antídoto contra la mediocridad”
¿Qué quería decir David con “descontento divino”?
No agaches la cabeza, desafía a los dioses, no te acomodes, no seas sumiso ni cobarde, y nunca, permitas que salga un pedazo de basura de la agencia.
David nos inspira a poner en práctica el descontento divino, a través de los 8 hábitos de las comunidades creativas:
1. Coraje
Las ideas son mágicas pero también son frágiles semillas que requieren de protección. Solo defendiéndolas comenzaran a construir el valor más preciado del mundo: La confianza.
2. Idealismo
La gente que está lo suficientemente loca para pensar que puede cambiar el mundo es aquella que lo hace.
3. Curiosidad
Solo en un estado abierto de curiosidad podemos explorar, soñar y hacer bebes en nuestra cabeza
4. Ser juguetones
Para desatar el hemisferio izquierdo del cerebro, distrae el derecho con media botella de vino, una ida al cine o llega a trabajar en piyamas.
5. Sinceridad
Si alguien nos pide nuestra opinión y no se la damos, nuestra respuesta no solo es deshonesta, ¡no vale nada!
6. Intuición
Somos más sabios de lo que pensamos.
La institución es el arte de escuchar al gurú que llevamos dentro.
7. El espíritu libre
Regla 1. No hay reglas
Regla 2. Nunca olvides la regla 1
8. Persistencia
Si el cliente mata tu comercial, hazle uno mejor.
Si mata ese, hazle uno aún mejor.
Y si mata ese, hazle el mejor de lo que eres capaz.
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